M8, más conocida como la Nebulosa de la Laguna, es una de las nebulosas de emisión más espectaculares del cielo nocturno, rivalizando únicamente con la gran Nebulosa de Orión (M42). Está ubicada en la constelación de Sagitario, a una distancia de 4000 años luz. Con una magnitud aparente de 6.00, M8 es una de las nebulosas más brillantes del cielo, pero su brillo está distribuido en un área de 1°30' x 0°40', por lo que en términos de contraste resalta menos contra el fondo del cielo que la Nebulosa de Orión.
Al igual que todas las nebulosas de emisión, M8 brilla porque radiación de alta energía (ultravioleta) proveniente de una fuente cercana (como una estrella o un cúmulo de estrellas joven) excita a los átomos que constituyen la nebulosa hacia estados más energéticos, para luego decaer, liberando en el proceso fotones (un fotón es la partícula elemental de la luz), que es la radiación que se detecta aquí en la Tierra.
Además de la contaminación lumínica de la ciudad, existe otro motivo que me impide enormemente disfrutar de la visión de la nebulosa: al ubicarse en la constelación de Sagitario, los meses ideales para su observación son los meses de Junio-Julio-Agosto; es decir, los meses del invierno austral. Para quienes vivimos en la ciudad de Lima, los meses de invierno son sinónimo de meses sin Sol, ya que prácticamente no hay días despejados en los meses de invierno en esta caótica ciudad.
La otra forma de observar M8 era observándola en horas de la madrugada (02:00 - 04:00 AM) en los días de Abril. Sin embargo, incluso en esa época, el cielo suele cubrirse por completo a partir de la medianoche, por lo que si me decidía a desvelarme para intentar observar a la nebulosa, al final todo dependía de la suerte.
En el año 2019, tuve un par de noches donde intenté cazar a M8, sin éxito. Aparentemente, la contaminación lumínica emitida por mi ciudad de residencia era suficiente para invisibilizar la nebulosa.
El 22 de Marzo del 2020, decidí intentarlo de nuevo, con la diferencia de que ahora contaba con dos ventajas: un cielo más prístino debido a las restricciones por la pandemia, y un filtro de contaminación luminosa UHC marca SVBONY. Al dirigir mi telescopio hacia la zona del cielo donde debía ubicarse la nebulosa, simplemente no daba crédito a lo que mis ojos estaban contemplando:
Con 28.125 aumentos, y con la vista desviada y adaptada a la oscuridad, el tamaño de M8 es similar al de la Luna llena, lo cual es excepcional para un objeto de espacio profundo. La forma de M8 es quizás lo que más llama la atención: como un todo, la nebulosa tiene una forma bastante irregular, mientras que su región interna es atravesada por una especie de puente que divide a la nebulosa en dos partes muy desiguales. Tal como se ilustra en el dibujo, la porción izquierda es más grande que la porción derecha, destacando en ella una región mucho más brillante que el resto de la nebulosa a la izquierda del par de estrellas del centro del dibujo. Sin el filtro UHC, sólo la mencionada región es visible con el telescopio. Por su parte, la porción derecha posee límites más difusos que los de la porción izquierda, y alberga en su interior al cúmulo estelar abierto NGC 6530, de magnitud aparente 4.60, el cual adorna como luces de árbol de Navidad a la ya hermosa Nebulosa de la Laguna.
Además de todo lo ya mencionado, M8 se ubica en un campo estelar muy rico, que adorna aún más la vista que ya se tenía al telescopio, variando la magnitud aparente de las estrellas desde 5.35 hasta 10.00. Tanto fueron los detalles que observaba que el dibujo tuve que hacerlo en dos días, en parte porque me gusta registrar la posición de las estrellas en el campo ocular con mucha exactitud. En total, la realización del bosquejo del dibujo (versión anterior al mostrado en la imagen) me demoró 3 horas, 3 horas que sin duda valieron la pena, ya que el lector puede estar seguro que el dibujo final es una representación fidedigna de lo que observé a través del ocular un 22 de Marzo del 2020. Tres años después, en Junio de 2023, tuve la oportunidad de observar M8 desde cielos oscuros, en un caserío de la provincia de Celendín, departamento de Cajamarca. Lamentablemente, no tuve el tiempo suficiente para dibujar lo que veía a través del telescopio, pero sí puedo afirmar que la vista es mucho más espectacular que la que se muestra en el dibujo realizado en Lima. Vista desde cielos oscuros, la Nebulosa de la Laguna ocupa todo el campo del ocular, siendo su zona central mucho más brillante que el resto de la nebulosa, manteniendo el puente su oscuridad característica. Por otro lado, el campo estelar estaba 10 veces más poblado de estrellas que las que se observan desde Lima. A partir de esta breve descripción, espero que el lector pueda hacerse una idea de lo maravilloso que es observar M8 desde cielos verdaderamente oscuros, lo cual, por supuesto, no quiere decir que no valga la pena observar este objeto desde cielos urbanos.
Fotografía de M8 tomada por el VLT Survey Telescope (VST), en el Observatorio Paranal de la ESO, Chile.